Foto: Conmebol.com
A diferencia de lo que se esperaba, en el comienzo el conjunto local no salió con intensidad a buscar el gol, sino que sabiendo que se enfrentaba a un rival de cuidado, se enfocó más en contener a los colombianos que en generar su propio juego. Por su parte, la visita intentó realizar su juego de posesión, que lo llevó a ser uno de los equipos que mejor fútbol demostró a lo largo del torneo, utilizó como eje a Macnelly Torres y desplegó su ataque entre Borja y Orlando Berrío, este último fue de lo más desequilibrante del "Paisa".
A medida que transcurrían los minutos el partido se desordenó y se plagó de imprecisiones y pelotazos intrascendentes, en ese desorden el dueño de casa tuvo su primer oportunidad para vulnerar a Armani. Una buena combinación entre los Angulo culminó con José, quien probó de media distancia y el esférico pasó apenas afuera. A pesar de contar con esa chance, el local no logró imponerse en el terreno de juego y los de Medellín cada vez se sentían más cómodos en el partido. Borja probó desde 30 mts y Librado Azcona desactivó el peligro y despejó el balón. El trabajo de Pérez y Torres en el eje comenzó a tener mayor asiduad, así Berrío y Borja se sintieron más acompañados y el conjunto visitante se arrimó con peligro al area de Azcona. Sobre los 35' del primer tiempo, una gran habilitación de Macnelly Torres para Berrío, que eludió a sus dos marcas y disparó un potente derechazo que vulneró a Azcona y puso el primer grito de la final para el cuadro colombiano.
Con la ventaja, el dominio territorial de los de Rueda se acentuó y hasta pudo aumentar. Antes del descanso, un tiro de Torres se fue apenas desviado, luego Borja desde lejos probó a Azcona y el disparo pegó en el techo del arco ecuatoriano.
En el segundo el conjunto local salió en busca del empate, la presión fue similar a la del partido ante Boca y más acorde a lo que mostró en partidos anteriores. A pesar de ese arranque vertiginoso, nunca logró lastimar con seriedad a Armani por lo que el visitante no pasó sofocones y llevó gran parte del complemento al juego que mejor le convenía y supo jugarlo con el manejo de la pelota como principal premisa.
Sobre el final, en lo que parecía una jugada aislada, Arturo Mina, tras una doble ataja formidable de Armani, se la llevó por delante y empató el partido, un resultado justo por el empuje que mostraron los de Repetto en la parte final.
Fue empate en la primera final, queda toda la gloria para la vuelta en el Atanasio Girardot el próximo miércoles.
Por: Lucas Olmedo
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